Me gustan las cocinas abiertas y comunicadas con el resto de la casa, aunque solo para verlas, porque creo que no lo haría, confieso que soy una "maniática antiolor a comida" (salvo si es olor a bizcocho, magdalenas y demás...), sin embargo esta cocina me ha encantado, porque sin estar del todo abierta al salón, la ventana instalada le da una sensación de amplitud tremenda.
Yo lo hubiera rematado con una puerta de la misma estética para combatir mi manía, je, je, pero por lo demás es ¡perfecta!.
Me encanta el mobiliario en blanco y negro, la sencillez, la luz....
Vía Fantastic Frank |